El planeta llegó a parar en una “época de proteccionismo alimentario”. Parte de los países ya restringieron exportaciones grandes de alimentos para proteger sus reservas en un marco de crecimiento inflacionario, según informa el medio Businessinsider. De manera que, Rusia y Ucrania ya implementaron restricciones respecto a las exportaciones de trigo. Impusieron restricciones para el comercio de productos clave tales países, como Indonesia, Argentina, La India y Kazajstán, a fin de mantener el nivel de los precios internos.

“El incremento de los precios de los alimentos puede derivar en un aumento del número de tales medidas de protección en el mundo entero e, igualmente, provocar una inflación mayor de los precios de los alimentos”, – es el pronóstico de los economistas de Nomura.

Dicho medio, haciéndose referencia a la USDA de los Estados Unidos,  informa que Rusia que estuvo asegurando el 20% de las exportaciones mundiales de granos y cereales, anunció prohibiciones temporales para los despachos de trigo al exterior. Igualmente, están restringidas temporalmente las exportaciones de azúcar, semillas de girasol, fue implementada una cuota de exportación para el aceite de maravilla. Ucrania, por su parte, siendo el quinto mayor exportador mundial de trigo con el 9% de las exportaciones, igualmente, prohibió las exportaciones de sus principales alimentos, incluidos el trigo y la avena, sin restringir las exportaciones del aceite de maravilla.

Para detener el incremento de los precios internos, La India, igualmente, restringió sus exportaciones de trigo. Hasta el 15 de junio quedará vigente la prohibición de las exportaciones de trigo y harina de trigo desde Kazajstán que tiene en sus manos el 4% de los despachos mundiales. Ello sucedió después de que los precios en el mercado interno estallaran y aumentaran el 30% en comparación con los del mes de febrero.

Indonesia, siendo el mayor productor mundial de aceites alimentarios, prohibió las exportaciones de su aceite de palma. El gobierno del país lo explica por una escasez del producto en el mercado interno y el crecimiento de los precios minoristas por sobre el 40%. Argentina, igualmente, empezó a restringir sus exportaciones de carne bovina a fin de reducir la inflación alimentaria dentro del país. Los expertos realizaron una comparación con la crisis del año 2008, cuando una serie de países limitaron sus exportaciones de trigo y arroz. Se considera que la situación podría repetirse, ya que actualmente existen más factores para ello.

Fuente: www.foodretail.ru