Japón no abandona los proyectos petroleros y gasíferos rusos en Sakhalín por causa de los beneficios económicos que suponen éstos: las distancias entre los países permiten despachar los productos de manera rápida, y los propios proyectos generan altos ingresos, según comentarios de Igor Yushkov, especialista de la Universidad de Finanzas y Fondo de Seguridad Energética.

Japón tiene la intención de conservar su participación en los proyectos de desarrollo de petróleo y gas en Rusia, ya que los considera importantes para su seguridad energética, dice el informe anual de la Cancillería japonesa “Libro azul de la diplomacia”. Hoy en día Japón conserva sus participaciones en dos proyectos de hidrocarburos: Sakhalín 1 y Sakhalín 2.

Fuente: www.ria.ru