La Unión Europea planteó ante la Organización Mundial de Comercio (OMC) un reclamo por un importe de 290 mil millones de euros. Según afirman los europeos, dicho valor es el equivalente de la “discriminación” de parte de Rusia respecto a las mercaderías elaboradas en Europa por causa de la política de sustitución de las importaciones. El regulador comercial internacional aceptó llevar la disputa, la cual, según se estima, será una de las más grandes por su importe en la OMC.

De acuerdo con lo que se indica en el reclamo de la Unión Europea, Rusia “discriminó ilegalmente” las mercaderías elaboradas en Europa aplicando tres medidas en el marco de su política de sustitución de las importaciones.

La primera es “una evaluación discriminativa de las solicitudes de compras para el Estado”. Según el regulador europeo, las empresas rusas vinculadas con el Estado, obtienen preferencias infundamentadas y presentan solicitudes en las licitaciones con un valor el 15-30% más bajo. Sin embargo, al obtener el pedido reciben el valor total.

Otra medida que tanto indignó a los europeos es el requerimiento de obtenerse autorizaciones preliminares. “Las empresas rusas que quieran comprar determinados equipos de maquinaria en el exterior deben obtener previamente autorizaciones de parte de la Comisión Rusa para la Sustitución de las Importaciones, mientras que la compra de equipos similares de producción nacional no lo requiere”, – indica la Comisión Europea en el reclamo.

Europa tampoco está de acuerdo con un tercer requerimiento, las cuotas nacionales de compra. Para casi 250 grupos de mercaderías, incluidos los medios de transporte, equipos, dispositivos médicos y textiles el 90% deben ser productos de fabricación nacional. Según la Comisión Europea, se trata de “limitaciones y estímulos mixtos” que discriminan a los productores extranjeros, lo cual es un incumplimiento de la las reglas de la OMC.

No se trata de quejas nuevas, pero hoy en día un reclamo de dicho porte más bien debe ser visto como una muestra de intensidad en las relaciones entre el Occidente unido y Rusia, según la opinión de Nikolay Nepliuev, miembro de la Asociación de Directores Independientes (AND). Es por eso que los E.E.U.U. también se unieron a la situación con la sustitución de las importaciones y se dirigieron simultáneamente a la OMC.

Por su lado, “Rusia declaró que participó de forma constructiva en las consultas y presentó aclaraciones detalladas respecto a las leyes nacionales y decretos legislativos con el fin de solucionar las disputas. La Parte Rusa declaró que estaba segura de que sus medidas estaban conformes con sus compromisos en el marco de la OMC, pero que no podía aceptar la solicitud de la UE para crear una comisión al respecto”, – se dice en el comunicado de la OMC del mes de noviembre.

Los especialistas están seguros de que Rusia esta vez no quedará si actuar. Nikolay Nepliuev declaró que “Rusia puede vetar la decisión que se adopte y recurrirla en las respectivas instancias de la OMC”.

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