Las autoridades veterinarias de varios países extranjeros resultaron no preparadas para negociar de forma operativa lo relacionado con la calidad de los productos.
Rosselkhoznadzor autorizó temporalmente la importación de piensos y aditivos forrajeros de una determinada lista de establecimientos extranjeros y les concedió a las autoridades veterinarias de los países exportadores una nueva posibilidad de controlar su calidad, según lo comunicado por el servicio ruso. En particular, por un mes se reanuda la certificación de los productos de 27 productores de piensos y aditivos forrajeros de Alemania, 15 productores holandeses, cuatro españoles y dos de Canadá.
Anteriormente, Rosselkhoznadzor había suspendido las importaciones de piensos y aditivos forrajeros desde 11 países, entre ellos, Polonia, República Checa, Estonia y Lituania, España, Gran Bretaña, Holanda, Estados Unidos y Canadá. La razón de ello era un nivel insuficiente de control de la inocuidad de los piensos que se exportaban a Rusia, el cual “estaba por debajo de lo admisible”, según la información publicada en la web del regulador. Las verificaciones de la autoridad rusa demostraron que los servicios veterinarios extranjeros no estaban controlando el contenido de estimuladores de crecimiento, metales pesados, micotoxinas, antibióticos, pesticidas y OGM en los productos exportados a Rusia, no revisaban el cumplimiento por los establecimientos de los requerimientos de la UEEA y Rusia, no controlaban el origen de la materia prima utilizada y la temperatura en la producción de los piensos.
Según el Director de Rosselkhoznadzor Sergey Dankvert, los servicios veterinarios de los países que tienen suspendidas sus exportaciones de piensos y aditivos forrajeros a Rusia, no se mostraron disponibles para realizar conversaciones de forma operativa. “A pesar de los múltiples intentos de Rosselkhoznadzor de invitar a conversar a los reguladores de Gran Bretaña, Estados Unidos y Canadá, no se consigue establecer un diálogo”, – confirma el Director Ejecutivo de la Unión Nacional de Piensos (NKS) Sergey Mikhniuk.
“El levantamiento temporal de las restricciones para las importaciones desde una serie de empresas productoras estabilizaría el mercado interno, incluso en el sentido de los precios. Es especialmente importante que la decisión se tome ahora, cuando las reservas de los piensos proteicos se están acabando”, – declara el Presidente de la Unión de Productores de Piensos Combinados Valery Afanasiev. El asunto sobre las importaciones de componentes de los piensos es sumamente serio. “Tenemos un déficit de ingredientes proteicos, pero nuestra dependencia más fuerte es de los aditivos forrajeros: aminoácidos, vitaminas, compuestos fermentados, ya que casi no tenemos producción propia, – señala Afanasiev. – Durante las restricciones por el COVID surgieron fallos de la logística y los precios aumentaron veces”. “Al mismo tiempo, los piensos listos para el consumo son importados solo para los animales domésticos que no son de consumo y para especies valiosas de peces. Para los peces se importan volúmenes insignificantes que podrían asegurarse por cuenta del incremento de la producción propia”, – comenta Afanasiev.
Fuente: http://meatinfo.ru
