La compañía alemana Papierfabrik Scheufelen ha creado un embalaje de papel a base de hierbas forrajeras secadas bajo el sol.

Entre las ventajas del nuevo material están la sostenibilidad ecológica, ahorro de la energía eléctrica y el agua, así como un proceso de producción simplificado.

Entre los aspectos tecnológicos de producción principalmente nuevos se pueden mencionar la reducción hasta el cero de la contaminación del medio ambiente. Los recursos hídricos, en particular, se ahorran gracias a la estructura de la fibra del papel de hierba: la fibra de hierba es menos densa en comparación con la celulosa de madera, por consiguiente, se requiere menos agua para ablandarla. Asimismo, se nota la diferencia en cuanto al gasto de la energía eléctrica. En particular, para elaborar una tonelada de papel de hierba se requieren 136 kW/h, mientras que para producir la misma cantidad de papel a base de madera son necesarios hasta 6000 kW/h.

Asimismo, el nuevo material permite minimizar el uso de los agentes químicos. El papel de hierba puede ser utilizado en calidad de embalaje para los alimentos. Su seguridad alimentaria se confirma por el certificado ISEGA, y la aptitud de procesamiento secundario y compostaje por el certificado FSC-Mix (FSC® C009951).

Hoy en día Scheufelen ofrece varias variantes de material, según el propósito: embalaje simple de papel de hierba bajo la marca greenliner en forma de contenedores simples y plegables, así como piezas insertadas para las cajas con una densidad de 80,90,105,130 y 200 g/cm, Scheufelen graspapier, un embalaje para la impresión a color con una densidad de 95 y 130 g/cm, phoenogras, una combinación de papel de hierba con una capa de papel blanco de fibra de madera con  una densidad de 360 g/cm y phoenolux, embalaje de calidad premium.

 

Fuente: www.fruitnews.ru