El ombudsman del sector de negocios y Presidente del Consejo de la Unión de los Vitivinicultores de la Federación de Rusia Sr. Boris Titov le entregó al Presidente de Rusia Vladimir Putin una carta ofreciendo implementar un impuesto para la importación de vinos, mosto de uva y alcoholes fuertes. Ello fue publicado por el periódico Vedomosti haciéndose referencia a las declaraciones del Ombudsman.

Según Titov, el arancel podría alcanzar hasta 30 mil millones de rublos, los cuales podrían ser invertidos en apoyar el sector nacional y permitirle competir con marcas baratas extranjeras. De acuerdo con la opinión del empresario, el sector vitivinicultor ruso requiere de alrededor de 50 mil millones de rublos al año.

La propuesta ha sido vista por el Presidente Putin y se está estudiando por el Gobierno del país.

 

 

Fuente: rosng.ru