La Unión Europea está elaborando una serie de reglas con respecto a la reducción del contenido de componentes nocivos en los fertilizantes. Según The Daily Telegraph, dicha medida que está orientada a proteger la salud de los consumidores podría asegurarle a Rusia “un monopolio” en ese mercado y concederle poder sobre los alimentos de Europa.

“En caso de que dichas limitaciones sean implementadas, surgiría un riesgo muy real de que ello le concedería a Rusia un monopolio real en el mercado europeo de fertilizantes y un gran poder sobre nuestros alimentos”, – le contó a The Daily Telegraph un especialista en el sector de la elaboración y producción de abonos.

Los países europeos tienen previsto reducir la concentración de cadmio en los fertilizantes minerales, ya que, según información proporcionada por los médicos, las consecuencias de dicha sustancia son la esterilidad, artritis y fallos en el funcionamiento de algunos de los órganos del cuerpo humano.

En particular, en contra de dichas enmiendas está luchando la Unión Nacional de Agricultores de Gran Bretaña, considerando que los nuevos requerimientos convertirían a Europa en “exclusivamente dependiente de los fosfatos rusos”.

Hoy en día los principales abonos están siendo exportados a los países europeos por China y África del Norte. Sin embargo, el contenido de cadmio en los mismos es mucho más alto que en los productos rusos. En estas circunstancias Rusia les ganaría la competencia a China y África del Norte

Fuente: https://rosng.ru